Cuando consideramos el costo de la batería a lo largo de su vida útil, entra en juego 4 factores relevantes: el valor, la capacidad, el voltaje y la vida útil del ciclo. El costo real de una batería, o cualquier producto consumible, depende de mucho más que el precio real. ¿Qué tan bien está construido el producto (en este caso su batería)? ¿Cuánto rendimiento puede esperar de su batería y por cuánto tiempo? ¿Cuáles son las limitaciones inherentes al estilo de batería que estoy considerando? examinemos más de cerca.
Una reacción natural al hacer cualquier compra es mirar el costo inicial, sin embargo, reemplazar esa batería a precio de ganga o rebaja con frecuencia le costará mucho más a largo plazo. Las baterías de plomo-ácido son asequibles, confiables, reciclables y comprobadas; pero requerirá un mantenimiento regular y aumentará el peso notablemente . Las baterías AGM (Absorbent Glass Mat) ofrecen baja resistencia interna, una vida útil larga, suministra alta corriente y mantenimiento extremadamente bajo. Su inconveniente es el mayor costo por amp-hora que las baterías inundadas-húmedas. Las baterías de iones de litio tienen la mayor densidad de potencia y requieren un mantenimiento extremadamente bajo, pero son susceptibles a incendios, cuestan más y rara vez son reciclables.
La capacidad de la batería mide la cantidad de energía almacenada en la batería. Esta clasificación depende de la velocidad de descarga, el voltaje requerido, la temperatura de funcionamiento y la autodescarga de la batería. A medida que aumenta su tasa de descarga, su capacidad disminuirá debido a la descarga de transferencia actual; y a medida que disminuye su carga, su capacidad disminuirá debido a la autodescarga de la celda. Tener la batería apropiada para una aplicación en particular, es un factor determinante para las necesidades de la capacidad de su batería. El tamaño y el costo de una batería varía en proporción a la capacidad.
Se debe reemplazar un paquete cuando la capacidad cae al 50%; sin embargo, al final de la vida útil puede variar según la aplicación y la preferencia. La medición de la capacidad restante de su batería debe realizarse cada tres meses para aplicaciones industriales.
En términos muy generales, el voltaje es el equivalente eléctrico de fuerza o potencia. Más voltios significa más energía (potencia) para hacer funcionar un vehículo o máquina. Puede parecer una buena idea instalar una batería con la mayor salida de voltaje posible. No vaya tan rápido. Abrumar su equipo con una batería de alto voltaje no hará que funcione más tiempo o más rápido. De hecho, solo desperdiciará el suministro de energía, acortará la vida útil de su equipo o máquina, y gastará mucho más dinero en reservas de energía no capturadas. Si bien un poco de energía (voltaje) en las reservas está bien, ir más allá de la capacidad solo le costará más recargar las baterías gastadas y reemplazar el equipo a largo plazo prematuramente deteriorado.
La consideración más crítica en el costo de una batería, es la vida útil del ciclo, que se refiere al número de ciclos de descarga/carga que puede proporcionar la batería. Las baterías de diferentes fabricantes pueden tener una capacidad, contenido de energía y peso similares; pero el diseño, los materiales, el proceso y la calidad influyen en el tiempo que la batería durará un ciclo. Los factores claves que afectan la vida del ciclo son el tiempo, la profundidad de descarga y el número de ciclos de carga/descarga completados.
Hay muchos aspectos para determinar el costo de las baterías más allá del precio real.
Sin embargo, el factor más importante a tener en cuenta es, si tiene la batería apropiada para cada aplicación. Tener la batería adecuada lo ayudará a reducir sus costos evitando el reemplazo prematuro, el desperdicio de energía o la fatiga del equipo.